lunes, 14 de diciembre de 2009

Abasolo (Peralta) y Pénjamo (Hacienda Corralejo y Plazuelas)

Esta vez damos la bienvenida a Alma una nueva escritora que se une a la labor de compartir con ustedes las aventuras que Sobre Ruedas vivimos.

Disfrutenlo


Domingo 23 de noviembre del 2009, Visita a Zonas Arqueológicas de Pénjamo “Peralta y Plazuelas”, este paseo lo planeo Edgar (mi novio) desde el miércoles anterior, busco la ruta y decidimos partir este día.
Mi novio y su tío Víctor pasaron por mi (Alma) alrededor de las 10:30 am, comenzamos la aventura hacia Abasolo, Edgar y yo viajamos en la Honda NX4 Falcon y Víctor en la Suzuki DR-200, en la Falcon como ustedes conocen íbamos a una velocidad alta (120 km/h), en comparación de la DR (90 km/h) en momentos bajamos la velocidad para que Victor no se nos quedara muy atrás.
Partiendo de León tomamos la carretera hacia Silao después Irapuato camino Abasolo y desviándonos a Pénjamo, hicimos la primera parada alrededor de las 12:30 pm en la zona Arqueológica de Peralta donde vimos las primeras pirámides, realmente no sabíamos por donde entrar y mi novio tomo un camino de terracería con hoyos, piedras ramas, ya saben cómo le fascinan estos caminos a mi amor, que en todo momento estamos a punto de de estar en el suelo, pero como es un excelente motociclista y todo el tiempo va a mi cuidado hace lo posible por que no tengamos ninguna caída, llegamos hasta las pirámides por este camino y llego uno de los vigilantes del lugar y nos indico el camino para llegar al estacionamiento y la entrada principal, pues por el mismo camino volvimos a regresar hasta llegar al lugar indicado, el costo de entrada es de $15.00, se dice que en este lugar las tribus que influyeron fueron: Los Chichimecas “PAME, GUACHICHILES y GUAMARES”.
A esta hora ya hacia hambre, Víctor nos preparo unas tortas que llevamos muy cuidadas en la mochila del tanque de la Falcon y nos sentamos debajo de la sombra de un árbol a disfrutar el almuerzo en la barda de uno de los llamados patios de las pirámides.
Siguiendo la aventura tomamos el camino hacia Plazuelas, pero a mitad de camino entre Peralta y plazuelas, Edgar vio un letrero en carretera donde decía Tequilera Corralejo y unos metros adelante hizo la parada para pedirnos opinión si queríamos visitar la hacienda, decidimos que si y tomamos el camino, eran aprox. las 2:50 pm y cerraban a las 3:00 pm, pero el personal encargado del lugar nos recibió muy amable.






Nos dieron el recorrido por la hacienda que es una maravilla de lugar, con una historia asombrante, es un verdadero viaje al pasado de México.



Vimos desde colecciones de latas de refresco, relojes, maquinas de escribir, etc.






El museo del vino y el tequila, entramos a los almacenes donde tienen las barricas donde se añeja el tequila.



y al final entramos a la tienda donde te dan aprobar el tequila y otras bebidas. Realmente cuando vayan a Pénjamo no dejen de visitar este lugar.




Después seguimos nuestra ruta a plazuelas también llamado casas tapadas, este lugar tiene un pequeño museo donde se exponen diferentes utensilios y armas que utilizaban los habitantes en esta zona los cuales eran al igual que en Peralta Chichimecas.




Saliendo del museo pasamos a la zona arqueológica que subimos una pequeña montaña y llegas a las pirámides y hay una vista muy padre en estos dos lugares las construcciones son diferentes, el costo en este lugar es de $20.00 pero los domingos no cobran o sea que nos ahorramos la entrada.


















Salimos de este lugar a las 6:00 pm. Tomando nuevamente el camino de regreso ya teníamos hambre y decidimos partir a León, llegamos al centro de Irapuato y decidimos parar a comer, yo tenía ganas de pozole y gorditas pero no encontramos ningún lugar donde disfrutar de esta deliciosa comida mexicana y decidimos optar por comer una rebanada de pizza con refresco y papas en un CIAO, terminamos y estuvimos en la plaza principal viendo a unos chavos que en un monumento trepaban para hacer malabares… que cosas verdad jamás hubieran imaginado los diseñadores de esa estructura en que iba a terminar.


Tomamos nuevamente a León, en todo el camino no habíamos tenido percances de ninguno y ohhh!!! Sorpresa alcanzamos un tráiler que olía espantoso a llanta quemada y justamente cuando nos acercamos a el por el lado derecho, la caja de carga se fue de lado parecía que se venía hacia nosotros, si que nos asustamos, pero gracias a Dios, no paso del susto.
Llegamos a León alrededor de las 9:45pm fue una aventura larga pero muy divertida e histórica.

Kilómetros recorridos 380